El seminario de esta semana a estado relacionado con los dibujos que realizamos desde que éramos pequeños y nos enseñan que todos nosotros, siendo cada uno de un lugar diferente, tenemos los mismos patrones y la misma base a la hora de hacer cosas simples como son una casa y una flor, aunque todos tenemos los mismos patrones algunas vedes difieren en algunas personas ya que cada una le da a su dibujo un toque personal que lo acerca más a su forma de ser.
Más adelante en el seminario Ángel nos indico que dibujásemos un cuerpo humano pero sin poder mirar al papel. Aunque a algunos este trabajo no les resultaría difícil al ponerle el inconveniente de cerrar los ojos añade una dificultad porque a lo que simplemente parece un simple ejercicio añade un poco de dificultad ya que en el resultado final no tenían una proporción igual en ambos brazos o en ambas piernas, por lo menos en mi caso no salió muy simétrico. Con esto lo que se pretendía era hacer una alusión a que no siempre plasmamos las cosas como realmente son sino que plasmamos una idea de esta la idea que cada cual tiene de un objeto o como en este caso de una persona.
En último lugar nos colocamos en grupos grandes y gracias a un espejo cada uno tenía que dibujar lo que la persona de su izquierda dibujaba pero no podías mira al papel directamente sino que tenias que mirar a través de un espejo. Fue una experiencia muy interesante ya que cada uno dibujaba lo que podía de su compañero a través del espejo con la diferencia de que si un compañero dibuja algo en su lado izquierdo tú lo dibujabas en tu lado derecho y así sucesivamente. En nuestro caso nos toco dibujar un mar y lo que empezó siendo un submarino acabo siendo un botijo sumergido.
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